El desfile de Llamadas, la fiesta más popular del Carnaval uruguayo, se celebró hoy, en su primera parte, como es tradicional por los barrios Sur y Palermo de Montevideo, colmados por miles de uruguayos y cientos de turistas.Los espectadores se agolparon a lo largo del kilómetro y medio recorrido para disfrutar con el sonar de las lonjas y vivar a sus grupos preferidos. Al rimo del tambor, las Agrupaciones de Negros y Lubolos (blancos pintados de negro) inundaron de candombe toda la zona, e hicieron vibrar a los presentes, muchos de los cuales bailaron de manera espontánea. Paula Juvencio, una hermosa joven de raza negra y de 18 años, abrió el desfile como Reina de las Llamadas, tras ser coronada en la elección que congregó a representantes de casi veinte zonas de Montevideo. Un total de 24 agrupaciones de negros y lubolos desfilaron por las estrechas calles de la zona sur de la capital uruguaya a escasos metros del Río de la Plata, por el que llegaron a este país sus ancestros de origen africano siglos atrás. Mañana, otras 24 agrupaciones, completarán las Llamadas, que desde el pasado año debieron dividirse en dos jornadas por el creciente número de participantes y la expectación popular. Los porta banderas y porta estandartes abrieron el desfile de cada grupo y detrás de ellos marcharon decenas de bailarines de ambos sexos y las más diversas edades, mamás viejas, gramilleros (especie de brujos), escoberos (malabaristas con la escoba) y vedetes. Todos ellos bailando candombe al ritmo diverso de cada "cuerda" (grupo) de tambores de unos setenta integrantes. Los tambores: chico, repique, piano y bombo, resonaron con inusual fuera, y muchos de los tamborileros sufrieron heridas en sus manos debido a la potencia al golpear la lonja, que quedaron ensangrentadas. T: 1:12 min.