Rice pide a la ONU que aumente la presión sobre el Gobierno de Zimbabue

Naciones Unidas.-  La secretaria de Estado de EE.UU., Condoleezza Rice, solicitó hoy al Consejo de Seguridad de la ONU que aumente la presión sobre el Gobierno de Zimbabue para que la segunda ronda de las elecciones presidenciales en ese país africano sean "libres y justas".

ampliar foto

(EFE)

La secretaria de Estado de EE.UU., Condoleezza Rice, y el ministro de Asuntos Exteriores de Burkina Faso, Djibril Bassole, comparecen ante la prensa tras un debate sobre las próximas elecciones que se celebrarán en Zimbabue, en la sede de la ONU en Nueva York, EE.UU..

Rice así se lo comunicó a representantes del máximo órgano de las Naciones Unidas en una mesa redonda organizada junto al ministro de Exteriores de Burkina Faso, Djibril Bassole.

"Hemos escuchado mucha preocupación respecto a que (en Zimbabue) las actuales condiciones políticas no permiten la celebración de unas elecciones libres y justas", dijo la jefa de la diplomacia a la salida del encuentro.

Aseguró que los asistentes a la reunión quieren transmitir al mandatario de Zimbabue, Robert Mugabe, "un mensaje de preocupación" por la "inaceptable" violencia que ha rodeado la campaña electoral y la grave situación humanitaria que atraviesa el país.

"No veo que el presidente Mugabe haya hecho nada que sea de ayuda al pueblo de Zimbabue, así que tal vez es hora de aplicar presiones internacionales", afirmó Rice.

Por ello, instó al Consejo de Seguridad para que sus 15 miembros se reúnan la semana próxima para tratar la crisis que atraviesa Zimbabue, antes de los comicios del 27 de junio, y adopten alguna medida para asegurar la transparencia de la jornada.

"Hay que enviar el mensaje firme de que lo que está sucediendo en Zimbabue es inaceptable", destacó.

El canciller de Burkina Faso coincidió con Rice en la preocupación que existe en los países africanos por la situación que atraviesa Zimbabue, aunque consideró que "todavía no está para imponer sanciones" al Gobierno de Mugabe.

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, envió esta semana al diplomático eritreo Haile Menkerios a Harare, con el fin de abordar una posible asistencia internacional en la celebración de la segunda vuelta electoral, en la que Mugabe espera reelegirse.

Menkerios, subsecretario adjunto del departamento de Asuntos Políticos de la ONU, tiene previsto abandonar mañana la capital zimbabuense y podría presentar un informe la semana que viene al Consejo de Seguridad sobre sus gestiones.

Washington y otros integrantes del Consejo de Seguridad como el Reino Unido y Francia son partidarios de aumentar la presión a Mugabe desde la ONU, ante lo que consideran es un abierto desafío del gobernante de Zimbabue a la comunidad internacional.

Pero otros miembros del máximo órgano de Naciones Unidas, particularmente Sudáfrica, consideran que las presiones son contraproducentes y prefieren que el caso de Zimbabue se gestione a nivel regional dentro de la Comunidad de Desarrollo de África del Sur (SADEC).

La oposición zimbabuense acusa a las autoridades de orquestar una violenta campaña de intimidación para evitar una derrota de Mugabe en las urnas que le obligue a abandonar el poder que ocupa desde 1980.

El propio mandatario aseguró el pasado 14 de junio que la oposición nunca gobernará mientras él esté vivo y que está preparado para tomar las armas y "defender al país de los traidores".

Zimbabue celebró elecciones el pasado 29 de marzo, en las que la oposición alcanzó la mayoría en el Parlamento.