Bigas Luna rueda los Sanfermines para "meter al chino dentro de España"

Pamplona.-  El cineasta Juan José Bigas Luna rueda hasta el día 9 en Pamplona un documental de siete minutos sobre los Sanfermines que se expondrá en el Pabellón de España en el 2010 con "la ilusión de meter al chino dentro de España".

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(EFE)

En la imagen, el cineasta Juan José Bigas Luna, que se encuentra estos días en Pamplona grabando parte del documental que se exhibirá en el pabellón español de la Exposición Universal de Shangai, en 2010, durante la rueda de prensa que ofreció en la capital navarra.

Bigas Luna ha presentado el documental en una rueda de prensa ofrecida después de presenciar en directo el encierro, por tercera vez en su vida, según ha dicho, aunque ha reconocido que ayer asistió por primera vez al lanzamiento del chupinazo.

Ha admitido que le "sorprendió mucho" y, tras reconocer que le gustan más "los proyectos que las obras acabadas" porque tiene "la energía y el deseo de hacer algo", ha dicho que "el chupinazo es el inicio de una fiesta, y ahí hay una energía de deseo; El deseo de la fiesta".

Asimismo, ha admitido que cinco minutos antes de que prendiesen la mecha se emocionó. "Tanta gente, tan apretados, me pareció muy especial", ha comentado el cineasta, quien ha agregado que "es una fiesta en la que hay mucho alcohol, mucha gente joven, pero no hay ni un atisbo de violencia. Es una cosa muy nuestra ya que creo que los anglos son mucho más bestias".

Juan José Bigas Luna y los también directores de cine Isabel Coixet y Basilio Martín Patiño son los encargados del contenido de las tres salas del Pabellón de España en Shangai, diseñado por el estudio de Benedetta Tagliabue.

Bigas Luna, que se encarga de la primera sala, ha aseverado que cree que han acertado encargando este proyecto a tres directores de cine ya que con esta Exposición Universal se pretende "retransmitir el sentimiento, la sensualidad".

Ha indicado que "al desmarcarse de un proyecto más expositivo pasando a un proyecto más narrativo, más pasional, podemos emocionar a los chinos", y se ha mostrado "convencido de que va a ser un pabellón histórico".

Según ha dicho, el documental que está rodando contará con el apoyo de "una instalación de sonido en todo el suelo y en el momento en el que aparezcan los toros se notará esa vibración", por lo que augurado que será "espectacular" tras recordar que hace años el pintor Rafael Bartolozzi le invitó por primera vez a contemplar el encierro desde un balcón muy bajo y le "impresionó" el ruido que hacían los toros al pisar el suelo ya que "no lo esperaba".

Ha matizado que con el trabajo que está realizando pretende transmitir que "somos un país potente", "creativo" ,"lúdico" y ha dicho que están grabando a alta velocidad, con tres cámaras sincronizadas con una visión de algo más de 160 grados, para que a finales de enero esté finalizado un proyecto en el que trabajan aproximadamente 150 personas.

También ha concretado que con las imágenes que está rodando no pretende "competir con la realidad sino ofrecer una visión", y ha apuntado que de estas fiestas quiere recoger "la emoción, la sensación de fiesta, de peligro, de lúdico. Esta mezcla, este ritual".

"Sé que estéticamente voy a lograr mucho porque es una maravilla, y con la tecnología que tenemos, mal lo tengo que hacer para que no sea precioso. Pero lo que quiero retransmitir es esa fuerza" ha dicho Bigas Luna, que según ha indicado, la cinta se proyectará en una pantalla de sesenta metros de largo por siete de alto.

El cineasta grabó el chupinazo, y retratará los encierros hasta el día 9 de julio, cuando abandonará Pamplona, y ha comentado que no filmará ninguna corrida de toros para el Pabellón puesto que "las corridas de toros sólo las entendemos algunos de nosotros, entre los que no sé si me incluyo".

Ha matizado que el de las corridas de toros "es un tema complicado de entender fuera del contexto", es "una cosa muy nuestra", "es una cosa de una gran fuerza y de una gran belleza", aunque ha matizado que "podría decir 100 cosas a favor de los toros y 101 en contra".

"En mis épocas de gran defensor de los toros decía que quería ser toro de lidia para pasarme cuatro años en el campo, al aire libre y luego morir en un acto-ritual, es maravilloso. Pero no sé si el siglo XXI está para aguantar esto", Ha dicho Bigas Luna.