Un catedrático asegura que el empleo y la reforma fiscal son claves para combatir la pobreza

Salamanca.-  El catedrático de Economía Internacional de la Universidad de Oxford Valpy Fiztgerald ha asegurado hoy en Salamanca que "las claves" para reducir la pobreza en el mundo son el empleo y una reforma del sistema fiscal.

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(EFE)

El catedrático de Economía Internacional de la Universidad de Oxford, Valpy Fiztgerald (i), que ha sido propuesto para Premio Nobel, pronuncia su discurso durante el VIII Encuentro Salamanca organizado por la Fundación Sistema, que en esta ocasión debate sobre "La lucha contra el hambre y la pobreza".

Fiztgerald, que ha participado en el VIII Encuentro Salamanca organizado por la Fundación Sistema y que en esta ocasión debate sobre "La lucha contra el hambre y la pobreza", ha afirmado en declaraciones a los periodistas que "sólo existen estas dos vías para que un país salga de la pobreza".

En opinión del experto inglés que ha sido propuesto al Nobel de Economía, si no hay empleos dignos "no podrá desarrollarse una nación".

Así, ha comentado que durante años la ayuda al desarrollo se ha centrado en la educación y la sanidad "que están muy bien, pero ahora tenemos una generación con la escuela primaria, pero que no tienen un trabajo y tiene que emigrar de sus países".

Por lo que respecta a la reforma del sistema fiscal, el catedrático de Economía ha precisado que ésta debe basarse en el modelo occidental de gravar sobre los que más recursos tienen y redistribuir estos en prestaciones sociales.

Durante su intervención en el VIII Encuentro Salamanca, Fiztgerald ha alertado de que la actual situación de crisis económica de las principales naciones del mundo ha provocado un descenso "alarmante" de la ayuda al desarrollo y la cooperación que se ha reducido en un 22 por ciento.

Esta situación ha redundado al mismo tiempo en un incremento del número de pobres en el mundo, hasta llegar al 16% de la población mundial que pasa hambre en este momento.

En este sentido, el economista ha recordado que el comercio mundial ha caído este año un 25 por ciento y hay naciones que basan la mayor parte de su economía en transacciones internacionales "por lo que la situación puede ser muy grave en breve", ha señalado.

Además, ha agregado que, con la crisis, los inmigrantes que trabajaban en Europa y Estados Unidos están dejando de mandar "remesas de dinero a sus familias, con lo que la situación de éstas en origen también se agrava".

Para Fiztgerald, la situación económica mundial es un efecto de "la globalización sin instituciones", lo que se traduce en que en los últimos 20 años se ha creado un sistema global en todos los ámbitos, pero no se han puesto en marcha al mismo tiempo organismos internacionales que lo controlaran.

"Las instituciones nacionales no se han reproducido en las transacciones globales", por lo que no existe una legislación mundial en ámbitos "delicados", ha comentado el también director del Departamento de Desarrollo Internacional del Queen Elisabeth House.

Una parte importante del problema financiero que se ha originado en el mundo, ha continuado, "es que el dinero nunca ha existido, ya que se iban pagando unos intereses con el dinero de otros, y así haciendo una montaña hasta llegar a la situación actual".

Sobre la posibilidad de que los ciudadanos de naciones desarrolladas pierdan derechos sociales como las pensiones, el paro o la sanidad por la quiebra de sus estados, Fiztgerald ha declarado que no cree que esto llegue a pasar y ha confirmado que es "optimista en este sentido".

Por otro lado, preguntado sobre los sistemas de bancos y las cajas de ahorro, el economista ha manifestado ser "un aficionado de las cajas españolas, no por su aportación social, sino por su arraigo local y por su capacidad de financiar la pequeña y mediana empresa".