Siete pacientes de trasplantes de riñón se reúnen una semana después de la operación

Los Ángeles (EE.UU.).-  Siete de nueve miembros de dos cadenas indirectas de trasplantes de riñón se reunieron hoy en la Universidad de California, una semana después de las operaciones, informó el canal de televisión KABC.

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(EFE)

En una cadena de ese tipo el órgano de un donante se entrega a un receptor compatible, el cual a su vez acepta que se dé el órgano que iba a recibir a otro receptor. EFE/Archivo

En una cadena de ese tipo el órgano de un donante se entrega a un receptor compatible, el cual a su vez acepta que se dé el órgano que iba a recibir a otro receptor.

El procedimiento permite que cada paciente reciba el órgano que es más compatible con su sistema y las posibilidades de rechazo sean ínfimas.

Las cadenas fueron iniciadas por Nicole Lanstrom, una funcionaria de inteligencia de la Fuerza Aérea, quien dijo haberlo hecho por altruismo, y el bombero Harry Damon, en honor de su hijo de 24 años muerto en un accidente.

Las dos cadenas liberaron en total seis riñones que fueron injertados en operaciones en las que participaron dos mujeres hispanas.

"Los milagros son parte de una cadena como estas. No solo pude ayudar a una amiga, sino también a toda esta gente que ahora está curada", dijo Sarah Dutkevitch, una de los donantes.

"Es un regalo increíble. Dios nos reunió por una razón. Estoy tan agradecida", indicó Valinda Jones, una de las receptoras del órgano.

Damon donó su órgano a Sheila Whitney y el hijo de ésta, Reginald Griffin, donó un riñón a Keenan Cheung.

La esposa de éste accedió a donar su órgano para injertarlo en la maestra hispana Sonia Valencia, que estaba en diálisis desde hace seis años, informó la cadena de televisión.

"Es una gran bendición ver mejorar a mi madre. "Esto es una inspiración que motiva a vivir nuevamente", señaló Cheung.

Valencia, de origen mexicano, había recibido la promesa de un riñón de su amiga Celia Contreras.

Pese a que los órganos no eran compatibles, Contreras decidió entregar su riñón para permitir que su amiga recibiera el de Cheung, el cual sí era compatible.

El riñón de Contreras fue injertado a un paciente de California.

"Ella pudo haber dicho, '¿Cómo voy a donar mi riñón a un extraño?' Pero no lo hizo", manifestó Valencia,

Contreras, también de origen mexicano, explicó que no se podía negar por el cariño a su amiga y que no podía dejar pasar la oportunidad.

"Dije, 'voy a ayudar a alguien hoy, no mañana'", agregó.

"Es una sensación fenomenal. No me di cuenta cómo iba a sentirme hasta que conocí al receptor de mi riñón. Se pueden ver las lágrimas de felicidad y alivio en sus familiares", señaló Lanstrom.