32 Mujeres cargarán a hombros el paso de Nuestra Señora de los Dolores

Madrid.-  La polémica sobre el aborto, donde las mujeres son protagonistas, ha llegado a las procesiones de Semana Santa en forma de lazo blanco, sin embargo el género femenino ha brillado por su ausencia en esta celebración, salvo excepciones como la de Madrid, donde 32 mujeres cargan a hombros el paso de Nuestra Señora de los Dolores.

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(EFE)

La polémica sobre el aborto, donde las mujeres son protagonistas, ha llegado a las procesiones de Semana Santa en forma de lazo blanco, sin embargo el género femenino ha brillado por su ausencia en esta celebración, salvo excepciones como la de Madrid, donde 32 mujeres cargan a hombros el paso de Nuestra Señora de los Dolores. EFE/Archivo

Desde hace tres meses, cada domingo las mujeres de la Cofradía del Silencio del Santísimo Cristo de la Fe acuden a su iglesia para ensayar de cara al próximo Viernes Santo.

Ese día recorrerán durante cinco horas el barrio de las Letras de Madrid con el trono de más de 800 kilos de peso a sus hombros.

Es el único paso integrado sólo por mujeres que desfila por el centro de la capital, de la quincena que marchan, y también de los pocos que lo hacen en España, según el Arzobispado madrileño.

La edad de las mujeres de la cuadrilla que portan la talla de Nuestra Señora de los Dolores, obra del escultor Antonio José Domínguez, oscila entre los 19 y los 65 años, y el abanico profesional es diverso, desde amas de casa a informáticas, precisa el capataz del paso, Rafael Díaz.

Movidas por la fe, por una promesa o por las ganas de participar en la Semana Santa, coinciden varias de ellas, se apuntaron hace cuatro años a esta iniciativa que desde hace tiempo venían demandado a la cofradía.

"Están rompiendo la regla en un mundo donde la mujer tenía un papel vetado y donde lo siguen teniendo en las demás cofradías", opina una de las cofrades, Ana María Ramos, que prefiere elogiar el papel de sus compañeras.

Ana María asegura que antes, en las procesiones el papel de la mujer se limitaba a "vestirse con una peineta y llorar", pero se muestra orgullosa "al haber demostrado que somos capaces de llevar un paso de peso exagerado para nuestras espaldas".

Son "anderas", porque cargan el peso a hombros, pero los más de 25 kilos que soportan por cabeza exigen esfuerzo, por ello en cada ensayo se preparan con fajas que les ayudan a soportar el peso.

Antes del ensayo, calientan con ejercicios, explica Ana María, para después subir el palio cargado de peso por una pequeña calle cercana a Atocha.

El Viernes Santo recorrerán el barrio de Las Letras sin ningún relevo, durante cinco horas, "que pasan en nada, por la ilusión y emoción que se siente en el momento", confiesa Belén Varas, otra de las cofrades.

Al día siguiente vendrá lo peor, "los hombros contracturados, desollados y en carne viva", según Ana María.

Sobre el lazo blanco en los pasos, capataz y cofrade coinciden en señalar que acatarán "la orden" de las Cofradías y Hermandades de Madrid, aunque Belén asegura que tiene constancia de que hay diversidad de opiniones al respecto entre las compañeras de la cuadrilla.

Las mujeres que portarán la imagen de Nuestra Señora de los Dolores por Madrid aún despiertan el interés de la gente durante la procesión y saben que son una excepción, porque en ciudades como Zamora otras encuentran el veto por parte de las cofradías.

En Madrid "no hay ningún problema" en que un paso sólo sea de mujeres, asegura el asistente eclesiástico de Hermandades y Cofradías del Arzobispado, Francisco Andrés Martínez, quien además explica que no se dan más pasos porque no se han pedido.