Boadella asegura que la mayoría de los catalanes no están por la aventura de la secesión

Madrid.-  El director de teatro Albert Boadella ha manifestado que el momento político actual es "fantástico" para que prosperase la secesión catalana, pero ha considerado que la mayoría de los catalanes "no están por esa aventura" y que el Estado tampoco "tiene fuerza moral para ello".

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(EFE)

El director de Els Joglars y de los Teatros del Canal, Albert Boadella, durante una conferencia que pronunció hoy en Madrid, en la que fue presentado por la presidenta regional, Esperanza Aguirre.

Boadella ha hecho hoy estas afirmaciones en su intervención en el Foro Nueva Economía, que ha estado precedida por la presentación de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, cuyo Gobierno confió al artista catalán la dirección de los recientemente inaugurados Teatros del Canal.

La intervención de Boadella, que ha congregado a más políticos que representantes de la intelectualidad, ha hecho referencia a la situación de Cataluña, de donde el artista se considera "expulsado y exiliado", a la manera en que piensa gestionar los Teatros del Canal y a la situación actual del movimiento artístico en España.

Ha rememorado someramente su "desplazamiento forzoso" desde el Ampurdán a Madrid y la "muerte civil" a la que "el universo político o paleolítico del nacionalismo" catalán le sometió cuando se convirtió en "la figura más mediática de Ciutadans per Catalunya".

En aquel momento, ha indicado, adoptó la "solución drástica" de "emigrar" a Madrid para preservar su futuro como artista "frente a cualquier inclinación cívico-política" y también fue entonces cuando decidió "borrar" a Cataluña de su vida y de sus planes artísticos, ya que nadie quería saber nada de él ni de Els Joglars.

Ha criticado que "el gremio de la cultura" catalana "mirara como siempre hacia otro lado," cuando la Generalitat aprobó subvencionar solo las obras de teatro en catalán, lo que ahonda en su opinión de que "el auténtico rasgo diferencial en Cataluña no es la lengua, la sardana o el Caganer, sino el silencio de los corderos de la cultura".

"Decir que no voy a actuar en Cataluña es un farol; es que no puedo actuar allí", ha afirmado Boadella, quien considera que la comunidad Catalana no volverá a ser "su tribu".

El director no se ha querido decantar por la derecha ni por la izquierda política, pero se ha confesado votante del partido de Rosa Díez (Unión, Progreso y Democracia) porque es, a su entender, "la continuación de Ciutadans en el conjunto de España".

La conferencia de Boadella ha estado cargada de frases irónicas y mordaces, especialmente para criticar el concepto de arte y belleza en nuestro país donde ha dicho que "con mucho más dinero" se ha hecho "una España mucho más fea", lo que él denomina "estilo Palestina: una inmensidad de hectáreas con un paisaje urbanístico" que le parece cercano a "un campo de refugiados".

El artista ha criticado el arte que se basa en la modernidad y la vanguardia y no esconde sino una crisis que se constata tanto en la Feria ARCO -"el feísmo -ha dicho- como reacción a la impotencia creativa"- como en la arquitectura o el "bufonesco espectáculo de la cúpula sixtina del señor Barceló".

El resultado, a su juicio, es que los ciudadanos se convierten "en un rebaño de acomplejados becerros que desfilan aturdidos" ante el "escándalo moral de las artes modernas".

De su repaso por las manifestaciones artísticas, Boadella solo ha salvado el deporte y el toreo, pero no el carnaval, "patético desmadre con altas dosis de cutrez que no debería tener jamás apoyo institucional".

Tampoco se ha salvado de su ironía la casa del Príncipe Felipe, "que vive en un chalé como los de Somosaguas con un mobiliario que parece prestado por la casa del tresillo y unos cuadros de Subastas Duran", ha dicho.