La crisis impone las reglas del nuevo estilo de vida americano

LOS ÁNGELES.-  La crisis económica se está llevando por delante parte del estilo de vida americano. La situación a la que se enfrentan los estadounidenses diariamente les ha llevado a cambiar el 'chip' y a aceptar cambios que hasta hace muy poco eran impensables. La crisis no sólo arranca viviendas a familias que no han podido pagar la hipoteca, o trabajos en Wall Street. También roba el modo de entender la vida y las costumbres que llevaban arraigadas décadas en la sociedad estadounidense.

kjpm (Flickr)

En California se 'matan' por ser vigilantes de la playa.

Para comprobar que las cosas ya no son como eran no hay más que echar un vistazo a cómo está la búsqueda de empleo. Hace pocos días se celebraron en Huntington Beach (California) las pruebas para ser vigilante de la playa durante el verano. 156 personas lucharon por hacerse con uno de los 25 puestos. Los organizadores aseguran que el número de solicitantes se dobló respecto al año pasado. Además, la media de edad subió considerablemente. Lejos de presentarse sólo jóvenes estudiantes dispuestos a lucir moreno y tipazo por las playas californianas, los responsables se encontraron con 'cuarentones' que se han quedado sin trabajo, pero que todavía están en buena forma.

Según publica Los Ángeles Times, en las pruebas estaban, entre otros, Ericka Lorenz, una medallista olímpica de waterpolo en 2000 y 2004, y Bentley, un agente de compras de 46 años que ya había sido vigilante de la playa hace 20 años. "El agua estaba tan fría que creo que me ha ayudado no ser tan delgado como cuando era joven", dijo Bentley, quien ha acudido a 12 entrevistas de trabajo en los últimos meses, todas sin éxito.

Además, cada vez son más las personas con estudios superiores que demandan trabajos en el sector de la comida rápida y del aparcamiento de coches, tareas que en el pasado realizaban estudiantes para ganarse unas pelas o trabajadores no cualificados, en su mayoría inmigrantes.

Dan es licenciado en Psicología por la Universidad de Virginia y, además de inglés, habla español fluidamente. Hace un mes acudió a una entrevista de trabajo para ser repartidor de comida a domicilio en Santa Mónica (Los Ángeles) . "Me sorprendió que hubiera tanta gente en una entrevista de una tienda de comestibles de barrio. Salí convencido de que me cogerían porque ponía hasta mi propio coche para repartir. Nunca me dieron el trabajo. Supongo que fue porque había demasiados solicitantes para un solo puesto. En ese momento me dí cuenta de lo grave de la situación en la que vivimos", explica.

La educación, otra víctima de la crisis

La educación es otra de las facetas que ha sido brutalmente perjudicada por la crisis. Las familias de clase media y alta de Estados Unidos estaban acostumbradas a dejarse gran parte de los ingresos en la educación privada de sus hijos. Sin embargo, ahora muchos padres se enfrentan a la incapacidad de hacer frente a los gastos de un colegio privado, que cuesta aproximadamente entre 4.000 y 28.000 dólares al año. Prescindir de las vacaciones o de cambiar de coche no fue tarea fácil, pero sacar a los hijos de estos centros está resultando especialmente traumático para las familias estadounidenses.

Para colmo, la educación pública tampoco pasa por un buen momento. El gobernador Arnold Schwarzenegger anunció en enero que se estaban despidiendo a profesores "por falta de fondos" y que eran conscientes de que la medida "influiría en los resultados académicos de los chavales".

Y los viernes, cerrada la Administración

Otra de las novedades de la 'nueva vida con la crisis' es que en California no puedes realizar ningún tipo de actividad burocrática en viernes. Más de 200.000 empleados estatales han visto reducida de lunes a jueves su semana laboral. Con esta medida el Gobierno de Schwarzenegger pretende ahorrarse 1.400 millones de dólares en pago de salarios. Los empleados han perdido con la nueva norma un 9% de su sueldo.

Aunque al principio hubo mucha confusión y los ciudadanos no podían creer que acudieras a renovarte el carné de conducir un viernes, a las 11 de la mañana, y te encontraras con la oficina cerrada, poco a poco la sociedad se ha resignado y ha aceptado que es mejor esta medida que echar a los trabajadores a la calle. Por suerte para los desempleados las oficinas para buscar trabajo han sido la excepción y no se han acogido a la normativa de cerrar los viernes.

Los expertos también apuntan a que las visitas a los grandes centros comerciales y de ocio se han visto considerablemente reducidas y que se intenta ahorrar al máximo en la lista de la compra.

Adiós a la viejas costumbres. La crisis impone las reglas de un nuevo 'estilo de vida americano'. ¿Crees que llegaremos a notar la crisis en la educación y en los servicios públicos españoles? ¿Cambiará también nuestro estilo de vida?