Uruguay debería tener una ley integral contra la violencia de género dice un experto

Montevideo.-  Uruguay debería combatir la violencia de género con una ley "integral" similar a la aprobada en España en 2004, cuya concepción es "la adecuada", dijo hoy a EFE en Montevideo la juez letrada de Familia Ana Iris Muñecas.

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(EFE)

"Nuestra ley apunta a la prevención del riesgo", aseveró la juez letrada de Familia Ana Iris Muñecas, quien explicó que la legislación uruguaya en esta materia recae en el ámbito del derecho civil, y no del penal, como ocurre en España. EFE/Archivo

Muñecas se manifestó así antes de intervenir en la conferencia "Prevención y actuación en materia de violencia de género", que se enmarcó en las jornadas "Mujeres por la igualdad" organizas por la Fundación Ramón Rubial-Españoles en el mundo y financiadas por el Ministerio de Trabajo e Inmigración español.

En la charla, también participó el asesor parlamentario de ese Ministerio Arcadi España, quien intervino en la elaboración de la Ley Integral contra la Violencia de Género aprobada por el Gobierno socialista en 2004, así como una representante de la Dirección de Derechos Humanos del Ministerio de Educación y Cultura de Uruguay, Cecilia Anández.

Muñecas opinó que Uruguay "debería aspirar a una ley integral contra la violencia de género", aunque destacó que la aprobada por el país sudamericano en 2004 tiene "buenos resultados", pues "se ha logrado que la mujer tome conocimiento y reciba el apoyo necesario".

La juez, que participó en la instauración de los cuatro juzgados de familia especializados en violencia doméstica que hay en Montevideo, advirtió de que "se toman las medidas más urgentes para proteger a la mujer", pero ésta "luego depende del apoyo de la sociedad civil, de las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) y de las organizaciones del Estado para mejorar su situación".

"Nuestra ley apunta a la prevención del riesgo", aseveró Muñecas, quien explicó que la legislación uruguaya en esta materia recae en el ámbito del derecho civil, y no del penal, como ocurre en España.

Por su parte, España dijo que esta norma, así como la Ley de Igualdad aprobada en 2007, son "ambiciosas" y "no combaten la desigualdad que sufren las mujeres desde un punto de vista estrictamente masculino", sino que tratan de emprender "una acción positiva".

"No es discriminación positiva, porque con estas leyes no se discrimina a nadie", manifestó España, que subrayó que el Gobierno presidido por José Luis Rodríguez Zapatero "apostó por hacer una ley que busca la raíz del problema, el género".

España destacó que no se llama "ley de violencia doméstica" porque "no se circunscribe sólo a lo que pasa en casa, al matrimonio clásico, sino que se expande a las ex parejas, los ex compañeros, etc".

Según el asesor parlamentario, gracias a esta legislación, las mujeres "denuncian más, porque tienen menos miedo" y están más protegidas que "nunca" por la sociedad.

España mencionó a medidas como las ayudas a las víctimas para el cambio de vivienda, los dispositivos policiales o los servicios de Asistencia Jurídica Gratuita, con las que se pretende -insistió- "proteger a la mujer", pero "no perjudicar a nadie"