La CE cree que no hay consenso para convocar otra reunión de líderes de la eurozona

Bruselas.-  En este momento, "no hay consenso" entre los Estados miembros para convocar una nueva reunión de líderes de la zona del euro para analizar la situación económica, según la Comisión Europea, que considera, no obstante, que corresponde a los países decidir si es pertinente celebrarla.

Según una información del diario francés "Le Monde", el presidente francés, Nicolas Sarkozy, quiere mantener este mes un encuentro sobre la crisis con sus colegas de la zona del euro con el objetivo de coordinar su estrategia de política económica y transmitir confianza a los mercados sobre la solidez del área.

El periódico apunta al 22 de febrero como la fecha más probable, coincidiendo con la cita organizada por la canciller alemana, Angela Merkel, en Berlín, para preparar la posición europea de cara a la reunión del G20 del 2 de abril en Londres.

El portavoz jefe de la Comisión, Johannes Laitenberger, señaló hoy en rueda de prensa que "no es útil comentar rumores" y dejó claro que en ningún caso sería responsabilidad de Bruselas convocar ese tipo de reunión.

"La solución a la crisis actual no está en las especulaciones, sino en adoptar medidas", como ya ha hecho el ejecutivo comunitario, recalcó Laitenberger, que agregó que el objetivo debe ser ahora una aplicación rápida y decidida del plan de reactivación.

Sarkozy ya organizó en octubre, cuando ocupaba la presidencia de turno de la UE, una reunión extraordinaria de líderes de los países del euro, a la que también asistió el primer ministro británico, Gordon Brown, y en la que se pactaron unos principios comunes para las operaciones de rescate de los bancos.

Animado por el éxito de la iniciativa, el presidente francés planteó la posibilidad de dar más relevancia al Eurogrupo (un foro informal que reúne a los ministros de Finanzas de la eurozona) y organizarlo en torno a los jefes de Estado o de Gobierno.

Pero esta posibilidad suscita rechazo, en primer lugar de los países que no forman parte de la moneda única, pero también de Merkel y del primer ministro luxemburgués, Jean-Claude Juncker, que ocupa asimismo la cartera de Economía y que lleva al frente del Eurogrupo desde 2005.