El Jardín Botánico, un lugar donde olvidarse del mundo

VALPARAÍSO (CHILE).-  Si lo que buscas es un día de paz, uno de esos lugares ideales para salir del 'mundanal ruido', sin tener que viajar largas horas, disfrutando de la belleza de naturaleza centenaria, multicolor, llena de vida, oxígeno y lo más importante, con mucha, muchísima paz, éste es tu lugar.

Mun (Flickr)

En las inmediaciones de los centros urbanos de Valparaíso, más precisamente entre la ciudad de Viña del Mar y Quilpué, se encuentra uno de los lugares más bellos de la región, el Jardín Botánico Nacional.

D. B.

A los que tenemos la fortuna de guardar entre nuestros recuerdos de infancia este pedacito de bosque protegido y enriquecido por especies de diversas partes del mundo, nos suena un poquito más el nombre de 'Parque del Salitre', un 'clásico' para acercarse con los padres en un día de campo o incluso a un cumpleaños de algún compañero de clase.

Debieron pasar años, incluso debieron cambiarle el nombre, para que me viniese a enterar que dicho nombre obedecía al origen de este bello lugar, a manos de un benefactor de principios del siglo XX, quien destinó parte de las ganancias obtenidas con la industria que movió el país antes que a un señor alemán se le ocurriera inventar el salitre sintético (luego vino el cobre, aunque esperemos que no surja el 'cobre sintético', ¿no?)

Al llegar al Jardín, podemos ver cuidados jardines decorados con especies exóticas, para una jornada de descanso ideal, además de la zona de pic-nic con 'quincho' incluido (accesorio para la barbacoa), para un asadito con los amigos, si se quiere claro está.

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En otro camino, se encuentran innumerables prados con diversas características, en muy buenas condiciones, donde se puede acceder andando o en vehículo, para aquellos que se llevan desde los hijos, la mascota, la abuela y el vecino, con mesa, bicicleta, balones y juego de paletas a la vez, a tan sólo 20 minutos de su casa… buen panorama, ¿no?

Aún así, con toda la gente deambulando, el silencio es posible de encontrar, y, dada la amplitud del lugar, se puede escuchar el sonido de las hojas movidas por el viento, el crujir de los árboles antiguos, los sonidos de infinidad de 'bichitos' en la plenitud de su hábitat, visitados por ciudadanos ansiosos de un espacio para el descanso mental y espiritual.

Por otra parte, este espacio tiene un lado aventurero, la zona de Canopy, para quienes desean ciertas dosis de adrenalina, dejándose deslizar mediante cuerdas y arnés entre los árboles y la flora del lugar. El canopy se considera un deporte ecológico, y en verdad se realiza en las copas de los árboles.

Sin duda, uno de los lugares clásicos del parque es su laguna, habitada por patos, cisnes y otras bellas especies. Muy cerca de este lugar, un espacio protegido, con un microclima artificial donde se pueden ver especies de la Isla de Juan Fernández (la mítica isla de Robinson Crusoe).

¿Te animas a venir?

Datos útiles

• Web del Jardín Botánico
• Dirección: Camino El Olivar s/n (El Salto), Viña del Mar
• Teléfono: (32) 67 25 66
• Precio de entrada: 1.000 pesos chilenos (1,50 euros).
• Se puede ir hasta allí en coche, o en 'micro' (autobús). Sólo hay uno que llega hasta ahí, en dirección a El Salto.