El primer ministro polaco espera que la visita de Lavrov rebaje las tensiones

Varsovia.-  El primer ministro polaco, Donald Tusk, espera rebajar las tensiones en las relaciones con Rusia con motivo de la visita que inicia esta tarde el ministro de Exteriores de este país, Sergei Lavrov, con quien tratará asuntos conflictivos como el escudo antimisiles de EEUU o la crisis de Georgia.

"Esta visita puede ser un paso en la dirección correcta", aseguro hoy el primer ministro, quien destacó el hecho positivo de que Lavrov haga este viaje pese al "malestar creado recientemente por la crisis del Cáucaso y las acciones de Rusia contra Georgia".

Lavrov se verá mañana Tusk y con su homólogo polaco, Radoslaw Sikorski, en unas reuniones que, según destacó hoy el jefe del gabinete del Primer Ministro, Slawomir Nowak, "deben de ser importantes no sólo para Polonia, sino también para toda la Unión Europea (UE)".

En esas entrevistas, el jefe de la diplomacia rusa transmitirá a las autoridades polacas el malestar de su país por la futura instalación del escudo antimisiles norteamericano en territorio de Polonia, y se discutirá la situación en el Cáucaso.

Polonia ha sido uno de los más firmes partidarios de la causa georgiana durante el conflicto con la Federación Rusa, cuando el presidente polaco, Lech Kaczynski (quien mañana no se entrevistará con Lavrov), lideró una plataforma internacional de países en defensa de Georgia, lo que le valió duras críticas desde el Kremlin.

Pero la principal causa del actual empeoramiento de las relaciones polaco-rusas, que por otro lado hace años que son más bien frías, es el sistema balístico que EEUU desplegará en Polonia, y que Rusia considera como una amenaza directa contra su seguridad.

El pasado 20 de agosto, después de 18 meses de negociaciones, Estados Unidos y Polonia firmaron un acuerdo para el emplazamiento en territorio polaco de diez lanzaderas de cohetes interceptores, que formará parte del escudo antimisiles estadounidense en Europa.