El secreto mejor guardado de ARCO

Una conclusión después de un primer paseo por ARCO: muchas fotos y pocos fotógrafos. Es verdad, como dice la nota de prensa, la creación fotográfica está ya absolutamente instalada entre los artistas y perfectamente consolidada en el mercado del arte internacional y en las principales colecciones del mundo. Es quizá la técnica más presente en esta edición. Es más fácil encontrar una foto que algo horizontal donde sentarse. Aunque, es más fácil encontrar asiento que alguien que se declare fotógrafo. Son artistas... Pero, ¿Es que no hay fotógrafos en ARCO?

Tanta foto y tanto photoshop que parece el SIMO. Esto, desde luego, no era así en las primeras ediciones de la feria. Entonces si uno quería comprar una foto tenía que irse a un kiosco de la casa de campo a por una postal. Sin embargo, en medio de esa apatía fotográfica, ¡Oh milagro!, la asociación Amigos de ARCO se sacó de la manga en 1988 los Recorridos Fotográficos para conmemorar el 150 aniversario de la invención de la fotografía.

Se ha venido pagando desde hace 20 años a una legión de fotógrafos para que den fe de la feria con sus personalísimos ojos con el objetivo de crear una colección internacional de fotografía inspirada en su totalidad en ARCO y que cumpla la doble función de desarrollar la foto como nuevo medio de creación y de promover su integración en el mercado artístico contemporáneo. Esto se ha conseguido de manera sobrada, pero, ¿Qué son los Recorridos Fotográficos? ¿Alguien ha oído hablar de ellos? ¿Alguien ha visto las fotografías? Decía Azaña que en España si uno quiere guardar un secreto lo mejor es que lo escriba en un libro. Pues bien: si uno quiere ocultar una foto que la incluya en los Recorridos.

La idea surgió, según Rosina Gomez-Baeza, como un homenaje al mundo del arte y como un tributo a la agencia Magnum, que inspiró la iniciativa. Magnum fue la primera agencia fundada por fotógrafos y concebida como una cooperativa, con la idea de que el fotógrafo nunca perdiera el control de sus imágenes, y por supuesto, pudiera mantener siempre el copyright de las mismas.

La colección cuenta hoy con mas de 400 obras de 79 autores. Están muchos de los fotógrafos españoles más destacados: Cristina García Rodero, Alberto García Alix, Joan Foncuberta, Ouka Lele o Gabriel Cualladó y algunos de los más interesantes jóvenes valores como Sergio Belinchón o Gerardo Custance. También hay alemanes, argentinos, brasileños, estadounidenses, franceses, guatemaltecos y hasta de ese lejano país llamado Portugal.

En los últimos años, los Recorridos han sido comisariados por Rafael Doctor, director del MUSAC, que ha sido el encargado de ir seleccionando a los fotógrafos. Paseando la vista por la colección, que ha sido cedida para su exposición y custodia al Artium de Vitoria, se comprueba como la Feria ha ido creciendo y transformándose. Cómo ha evolucionado la relación entre el arte y la fotografía. Cómo ha dejado de ser territorio exclusivo de los fotógrafos y ha pasado a ser campo de trabajo y de experimentación de casi cualquier artista. Algo así como lo que antes sucedía con el dibujo. El dibujo era punto de encuentro de pintores, escultores, artistas conceptuales, arquitectos e, incluso, fotógrafos. Hay grandes ejemplos de fotógrafos dibujantes. De eso hablamos otro día.

Hoy les recomiendo tres fotos, de ese magnífico montón, que no deben perderse bajo ningún concepto: el 'Rockero' de Gabriel Cualladó, el 'Mario Conde' del americano Bruce Gilden y 'La mano' de Alberto García Alix. Abran y vean, lo mejor que puedan, el secreto mejor guardado de Arco.

*Sofía Moro es nuestra colaboradora de fotografía